Cuando el consumo de bebidas alcohólicas es un problema

 
El consumo de bebidas alcohólicas ha estado presente a lo largo de la historia del hombre y sin duda está claramente integrado a la cultura de las distintas sociedades. Excepto en los grupos que por motivos religiosos, u otros, no consume alcohol, en nuestro imaginario resulta difícil pensar situaciones de festejo o celebración sin bebidas alcohólicas. Incluso desde la salud se ha argumentado, a favor del consumo moderado de alcohol,  efectos beneficiosos por ejemplo en la enfermedad cardiovascular. A pesar de esta aceptación cultural, frecuentemente aparece el debate acerca de la necesidad de restricciones, prohibiciones y/ o medidas preventivas para minimizar los efectos dañinos del alcohol en nuestra sociedad. 
 
Alcohol y sociedad
 
Nuestros mayores temores y prejuicios suelen estar vinculados a las llamadas drogas ilegales, pero el impacto social ocasionado por el consumo abusivo del alcohol supera ampliamente al de otras sustancias. Simplemente para tener una idea de qué hablamos,  algunos datos: 
 
El 47% de las personas que comienzan a beber alcohol antes de los 14 años desarrollarán una dependencia en algún momento de su vida, en comparación con un 9% de aquellos que esperan como mínimo hasta los 21 años para iniciar el consumo.
El 50 % de la morbi-mortalidad (enfermedad – muertes) por accidentes de tránsito está asociada al consumo de alcohol. (OMS) 
En la Argentina el alcohol está presente en el 26% de los casos de accidentes de tránsito que llegan al servicio de guardia. El 47.6 % de las consulta a guardia por violencia están asociadas al consumo de alcohol. En las consultas por consumo de drogas, el alcohol estuvo presente en el 80.5 %.  En un estudio piloto en comisarías se observó que el 44.1 % del total de detenciones (por delito o contravención) se asoció al consumo de drogas, siendo la sustancia más frecuentemente vinculada (82.7 %) el alcohol. (Observatorio de Coordinación de Políticas Sociales en Adicciones).
 
Cuándo parar
 
Resulta difícil establecer en qué momento el consumo de bebidas alcohólicas significa un riesgo para la persona o su entorno, frecuentemente nos encontramos en una zona gris.   La mayoría de las personas que consumen alcohol consideran que no tienen problemas con el mismo. Muchas veces la familia se encuentra involucrada en el problema también sin reconocerlo.  Los problemas no se presentan en general en forma brusca sino que van apareciendo a lo largo del consumo y no siempre es sencillo identificarlos. (ver Cuadro 1) 

¿Por dónde empezar cuándo creemos que existe un problema con el alcohol?
 
Poder pensarlo como un problema
 
Cuándo percibimos incomodidad, ya sea de nuestra parte o del que nos acompaña,  respecto de la forma en que uno o el otro consume alcohol o en relación a las actitudes que aparecen como consecuencia de este consumo (cambios en la personalidad, irritabilidad, situaciones de intoxicación –vómitos, alteraciones de la conciencia-), cabe pensar que hay un problema. Poder pasar de la sensación displacentera a la idea de que enfrentamos una problemática hará la diferencia en las decisiones a tomar.  

Poder hablarlo 

Resulta complejo encontrar la forma de hablar sobre este problema. Para empezar no debemos pensar en términos de culpabilidad. La culpa suele estar presente tanto en quién presenta la enfermedad como en los que lo acompañan, es importante saber que en las enfermedades no hay culpables. Los niños suelen creer que lo que sucede puede ser su culpa. Debemos evitar hablar del tema mientras la persona se encuentra bajo los efectos del alcohol. El objetivo debe estar orientado al pedido de ayuda, dado que no necesariamente dependerá de la familia, los amigos o del propio paciente lograr el control o los pasos del tratamiento. Si en algún caso usted siente que no puede hablar del tema dentro del seno familiar, puede encontrar un espacio fuera del mismo, este problema es una enfermedad y no debe provocar vergüenza, nunca es recomendable quedar atrapado en el secreto familiar.   

No adaptarse

Es frecuente que toda la familia, a lo largo del tiempo vaya incorporando actitudes de adaptación, tolerando el problema, encubriendo algunas situaciones o excusándolas, modificando sus costumbres inclusive. Una de las primeras medidas para afrontar esta enfermedad es no adaptarse, se puede comprender, ser paciente respecto de los cambios pero no es conveniente ser complacientes.     

Buscar ayuda

Es importante saber que si el paciente no desea pedir ayuda la familia puede hacerlo. 
 
Dónde buscar ayuda: 
 
Médico de cabecera
El médico de cabecera podrá ayudar al paciente y orientar a la familia en el reconocimiento del problema y en los caminos a seguir. 
 
AA (Alcohólicos Anónimos) 
www.aa.org.ar
osg@aa.org.ar
Tel: (011) 4325-1813
 
AL-ANON / ALATEEN
www.alanon.org.ar/alanon/cocooncenter
0800-333-0784
 
 

Cuadro 1 
 
El siguiente cuestionario puede ayudarnos a identificar si nosotros o algún familiar presenta un problema con el alcohol.
Si se responde "Sí" a cualquier pregunta, es posible que exista este problema. 
 
• ¿Algunas veces usted bebe más de lo que quiere?
• ¿Le ha molestado comentarios de otros respecto de su consumo de alcohol?
• ¿Ha tratado de disminuir la cantidad que usted bebe y ha fallado?
• ¿Usted pierde la memoria (se le dificulta recordar las cosas que pasaron) de lo que pasa mientras bebe?
• ¿Sus problemas en el colegio, trabajo o en sus relaciones personales han empeorado desde que usted comenzó a beber?
• ¿Usted sigue bebiendo a pesar de que sabe que esto le está ocasionando problemas?
• ¿Usted bebe cuando está estresado o para tranquilizarse?
• ¿Usted bebe solo?
• ¿Usted puede beber mucho más ahora de lo que antes podía?
• ¿Alguna vez se siente incómodo cuando no se ha tomado un trago?
• ¿Usted bebe cuando es importante mantenerse sobrio?
• ¿Usted toma más aprisa que los demás? 
• ¿Usted piensa y habla con frecuencia sobre la bebida?
• ¿Usted se ha sentido apenado por algo que dijo o hizo estando bajo los efectos del alcohol?
• ¿Bebe por la mañana?
• ¿Ha sufrido accidentes asociados con el alcohol?
 

Cuadro 2

¿Cuáles son los beneficios de eliminar los problemas con el alcohol?
 
Mejor nutrición
Mejor concentración y memoria. 
Menor irritabilidad 
Mejor función sexual
Mejor autoestima
Evitar problemas serios de salud (gástricos, hepáticos, neurológicos, cardiovasculares, etc.)
Evitar problemas en las relaciones familiares  y laborales
 

Cuadro 3
 
Situaciones en las que NO se debe tomar alcohol
 
CONDUCCIÓN ¿Por qué? 
 
Asociado a accidentes de tránsito. Aún con dosis reducidas de alcohol, se producen  alteraciones sobre la percepción visual, el tiempo de reacción y la coordinación motriz. 
 
EMBARAZO ¿Por qué?
 
Los efectos del alcohol cerca (mes/es previos) y durante el embarazo pueden provocar discapacidades físicas o mentales, y problemas de conducta o aprendizaje. 
Se desconoce que cantidad de alcohol puede ser ingerida sin corren algún riesgo, por lo que cualquier cantidad es potencialmente nociva. 
Tampoco hay un momento del embarazo en que la madre pueda tomar bebidas alcohólicas sin correr algún riesgo. 
 
ADOLESCENCIA – INFANCIA ¿Por qué?
 
Es ilegal.
Mayor toxicidad  
Mayor exposición a accidentes, peleas y riesgos en general, (por ejemplo: relaciones sexuales no seguras, situaciones violentas)Trastornos del desarrollo y aprendizaje
Daño neurológico. 
Los accidentes de tránsito asociados al alcohol son una causa importante de muerte en gente joven 
Mayor riesgo de alcoholismo 
 
ALGUNAS PATOLOGÍAS  (por ej. hepatopatías)
 

 

Autor: Dra. Cecilia Calvo