Las quemaduras pueden ser producidas por diferentes agentes (sol, sustancia química, electricidad, fuego, agua caliente, vapor). Las lesiones pueden ser solo de la piel o tejidos por debajo de la misma. Pueden ir desde el enrojecimiento de la piel, la formación de ampollas hasta lesiones más profundas con acartonamiento de la piel.  

Cuanto mayor sea la superficie involucrada y mayor el compromiso de tejidos será mayor también la severidad. Si la piel es lesionada se pueden producir infecciones, por lo que se recomienda en estos casos la consulta médica. 

 

Recomendaciones:

 

- Alejar la fuente de calor, eliminar la tela que cubra la piel lesionada (a menos que se haya adherido a la piel) 

 

- Dejar correr agua de la canilla sobre la lesión. 

 

- Si la lesión es superficial y pequeña simplemente secar la lesión (comprimiendo, sin arrastrar) y cubrir con gasas o tela limpia (mantener la lesión cubierta evita infecciones).

 

- Evitar aplicar antisépticos, dentífrico o preparaciones de tipo caseras.

 

- Si la lesión es extensa o profunda consultar al médico.